miércoles, 20 de julio de 2011

ALOE VERA


Aloe vera

            Uso casero del aloe vera:

La hoja del aloe recién cortada posee efectos curativos y alimentarios más efectivos y potentes que cualquier extracto o gel comercial.

            Extracción de la pulpa de la penca

- lavar bien la hoja (penca) y cortar 3 cm. de la parte inferior (ancha) de la hoja.
- cortar los bordes espinosos.
- separar la piel exterior.
- extraer la pulpa.
- si se desea eliminar la aloína (sustancia amarga laxante y purgativa) dejaremos la pulpa en remojo en agua fría 12 horas.
- la pulpa podrá ser utilizada directamente masticada, batida o licuada y puede ser combinada con frutas, verduras y otros alimentos.
- conviene añadir el jugo de medio limón para mejorar la conservación y evitar la oxidación.
- conservar en frigorífico.

            Uso interno y externo:

- En uso interno el aloe es una excelente fuente de: vitaminas (A, B-1, B-2, B-6, B-12, C, E, Colina) acido fólico, encimas y aminoácidos y todas las sales minerales necesarias para nuestro organismo…
- En uso externo ,aplicar directamente la pulpa separando la piel más plana o sin piel en: quemaduras (cualquiera que sea su causa) heridas y cortes, llagas y escaras, picaduras de insectos y mordeduras, hongos, pie de atleta, manchas de la piel, dermatosis, dermatitis, acné y granos.
- Así mismo, se pueden aplicar compresas de la pulpa o del jugo puro.
- El jugo puro se puede aplicar en forma de loción dérmica o capilar y para el lavado ocular, o como compresa sobre los parpados cerrados.

           Receta del mes
1 lata pequeña de piña con el almíbar
2 naranjas grandes (sin blanco)
1 plátano maduro
3 cucharadas de germen de trigo
30 gr de azúcar moreno (se podría intentar sustituir por estevia, controlando la proporción)
1/2 l de agua
70 g de Aloe

Para mayor información contáctenos en:
-Web: www.aloedelavera.com
-Mail: aloedelavera@gmail.com   info@aloedelavera.com
-Teléfono: 690716310 - 629964087 -655255073



    


    



    






   



















          











martes, 1 de marzo de 2011

FORMAS DE USO DE LAS PLANTAS MEDICINALES

Las plantas, según sus diferentes modos de uso o preparación, pueden actuar desde el plano propiamente físico (tejidos, órganos, y sistemas del cuerpo) hasta estados mentales, emocionales, o incluso el campo energético y espiritual, como en el caso de las esencias florales, descubiertas por el doctor Edward Bach.
Muchas de las plantas se usan de múltiples formas. Y muchos de estos remedios pueden complementarse o tener efectos similares. Podemos beneficiarnos de las propiedades de las plantas por medio del alimentos o bebida, baños, inhalaciones, colutorios, gargarismos, masajes, emplastos...

Formas más corrientes de uso de las plantas medicinales:

Aceites esenciales.

Se obtienen por destilación y es la parte más potente de la planta. Se usan como condimento, en aromaterapia o para introducirlo en la piel a través del masaje. Los hay de Limón, Lavanda, Pino...

Aceites medicinales.

Son aceites, preferentemente de oliva puro, a los que se han añadido plantas digestivas, o con otras propiedades, cuya absorción por el organismo, es más fácil de ese modo. Hay aceites digestivos con Salvia de los prados, el Lúpulo o Limonero. Y digestivos y aromáticos con Laurel, Romero o Tomillo.

Aguas aromáticas.

Se preparan con aceites esenciales disueltos, normalmente, en alcohol, a los que se añade el agua. No se conservan más de un mes desde su preparación. Por ejemplo el agua carminativa contiene esencias de: Alcaravea, Limón, Cilantro, Hinojo y Menta.

Alimento.

Crudas o cocidas. Hay, aunque no seamos conscientes de ello, muchas plantas y frutas de las que comemos, con propiedades medicinales. Por ejemplo en ensaladas, el Diente de león o la Verdolaga. Y como verduras cocidas, la Ortiga o la Parietaria.

Baños.

Se añaden al agua de baño las propiedades medicinales de las plantas, ya sea en infusión, decocción, esencias, sales etc. Pueden ser relajantes como la melisa o la cebada. Estimulantes como el pino. O emolientes y limpiadoras como la manzanilla o el pensamiento.

Cocimientos.

Se obtiene hirviendo la planta durante quince o veinte minutos, si son flores o hierbas. Y de treinta a cuarenta minutos si se trata de raíces o cortezas leñosas. Se pueden usar de este modo la Zarza o la Grama común entre otras.

Compresas.

Puede ser una gasa humedecida en infusión o cocimiento de la planta, y colocada en la zona afectada. O prensar suavemente la planta cruda o hervida, envolverla en la gasa, y colocar sobre la piel. Por ejemplo la compresa de Brezo fresco.

Comprimidos, cápsulas, pastillas, píldoras, grageas o perlas.

Son preparados mas o menos sólidos, a base del resultado de triturar o prensar las plantas. Otros menos densos, a base de aceites o extractos con sus propiedades. Podemos encontrar perlas de Germen de tigo, pastillas de Alfalfa...

Cremas.

Menos sólidas y más finas que los ungüentos, preparadas con más cantidad de agua. Se usan no solo para cosmética, sino para quemaduras, picaduras, contusiones o infecciones de la piel. Hay muchas, por ejemplo de Caléndula o Milenrama.

Emplastos.

Preparados para aplicar sobre la piel como las compresas, no obstante, pueden contener, además de las plantas ácidos grasos y resinas. Al contacto con el cuerpo se reblandecen por el calor y se adhieren a la piel. Con hojas de Patata frescas, podemos hacer un emplasto para el dolor en articulaciones y con la harina de semillas de Linaza tenemos un emplasto ideal para "madurar" quistes o abcesos.

Esencias florales.

Son preparados que contienen la esencia vital de la planta. Hay más de un método para realizar este proceso, no obstante, se ha de llevar a cabo por personas que conozcan el tema y tengan la sensibilidad necesaria. Trabajan sobre estados emocionales o energéticos y su capacidad de sanar al hombre, abarca mucho más allá de la forma física.

Extractos.

Es una solución alcohólica (o con glicerina vegetal ) que extrae las propiedades de las plantas. Es similar a la Tintura pero con un poco menos de concentración.

Gotas.

Son las sustancias medicinales de la planta diluidas en líquido, normalmente agua. Uno de sus usos más frecuentes es el de colirios para los ojos.

Infusión.

Se vierte agua hirviendo sobre la parte de la planta elegida, normalmente seca, y se deja en reposo unos minutos, diez o quince en la mayoría de los casos. Por ejemplo la Menta o la Melisa.

Inhalaciones o vapores.

Pueden hacerse hirviendo la planta e inhalando los vapores que desprende. O esencias ya preparadas, en un difusor. Pino o eucalipto, son de las más usadas, en ambos casos.

Jabones medicinales.

Son jabones tradicionales a los que se han añadido sustancias de plantas medicinales, para que aporten a la piel unas propiedades determinadas, Por ejemplo, la Avena que purifica y suaviza.

Jarabes.

Es una solución de azúcar, miel o melazas en agua, u otro líquido, al que se añaden las propiedades de una o más plantas, bien sea en extracto, cocimiento, etc. Así conseguimos una buena conservación y una fácil dosificación.

Maceración.

Es una forma de extraer la sustancia medicinal de la planta, dejándola en un líquido frío o caliente, que puede ser agua, vino, aceite o alcohol, variando el tiempo del proceso, según el tipo de planta. Generalmente de doce a veinticuatro horas en agua, como sería el caso del Regaliz. Y diez o quinde días en alcohol. Por ejemplo:La Cariofilada.

Polvo.

Es el resultado de la trituración de las plantas, hasta conseguir un polvo muy fino que se puede esparcir sobre heridas, como el Tomillo y la Consuelda. O para disolver en líquidos para beber, como la Ajedrea o el Salsifí.

Tinturas.

Soluciones hidroalcohólicas, donde se han extraído las propiedades de la planta seca, sumergiéndola en agua, vino, vinagre o éter. Las más corrientes se obtienen en alcohol, como la de Genciana o Tormentilla.

Ungüentos.

Preparados a base de sustancias extraídas de las plantas, más alguna sustancia grasa (aceite, vaselina, lanolina...), se usan en picaduras, golpes, contusiones o quemaduras. Se venden preparados con diversas formulas y distintos ingredientes.

Vinagres aromáticos.

Consiste en dejar macerar dentro del vinagre algunas hierbas aromáticas (Ajo, Laurel, Romero,...).

Vinos medicinales.

Durante un tiempo prolongado, se macera la planta en vino, tinto o blanco según se precise. Por ejemplo, la hierba de santa María en vino blanco durante diez días.